Te encuentras en el momento en el que te autoconvences de que estás mejor solo. Del que piensas que no necesitas una media naranja que te acompañe en tu día a día.
Sabes perfectamente que la realidad no es así. Que la echas de menos. Esos pequeños detalles que te sacaban la más mínima sonrisa que hacía mucho más ameno el horror de un lunes con examen a primera hora o las miles de tardes muertas en que te pasas horas mirando al techo.
Día tras día superando aquello que dejó marca dentro de tí. Aquello que te hizo feliz en su momento pero ya no está.
A pesar de todo ello, sabes que no es lo que necesitas en tu vida. Aquello que acaba con tu paz mental. Aquello que te supone dolor y sufrimiento en lo más profundo de tu ser.
Se fuerte, echar de menos es un paso más. Un paso más para encontrar aquello que realmente te hará feliz.
Nostalgia, 317.